Papa Francisco: recordamos su llamado urgente a la conversión ecológica y la justicia climática

En medio del pesar mundial por el fallecimiento del Papa Francisco, líderes católicos, activistas ambientales y comunidades eclesiales recuerdan con fuerza su legado en la defensa de la vida y el planeta. A casi diez años de la publicación de Laudato Si, su encíclica sobre el cuidado de la casa común, el mensaje del pontífice cobra renovada vigencia frente al avance de la crisis climática global. En una edición especial de La Hora Verde, Argentina Saavedra (Movimiento Laudato Si Perú), Javier Jahncke (CEAS) y Rocío Valdeavellano (Comisión de Ecología Integral – RPA) reflexionaron sobre la importancia de este documento y los desafíos que siguen pendientes en el Perú y el mundo.

Argentina Saavedra recordó que Laudato Si nació como respuesta al sufrimiento causado por desastres climáticos extremos y destacó que, pese a su alcance global, el mensaje de la encíclica aún no ha calado en las bases sociales. “En las parroquias y comunidades, muchas veces se reduce a no botar basura o sembrar árboles. Pero Laudato Si va mucho más allá: plantea una transformación profunda de nuestros estilos de vida y de nuestras estructuras económicas”, sostuvo.

Por su parte, Javier Jahncke calificó el momento actual como “dramático” y alertó sobre el avance de un modelo económico basado en el consumo desmedido, el extractivismo y el descarte. “Diez años después, seguimos atrapados en una lógica que sacrifica territorios y comunidades en nombre del crecimiento económico. Laudato Si nos interpela a recuperar la noción de bien común y a entender que no hay futuro sin un cambio estructural”, afirmó.

Rocío Valdeavellano subrayó que Laudato Si es un documento dirigido no solo a los católicos, sino a toda la humanidad. “Es un mensaje ético y espiritual que conecta el clamor de la Tierra con el clamor de los pobres. La conversión ecológica implica defender todas las formas de vida y cuestionar los modelos que generan desigualdad y destrucción ambiental”, señaló.

Los panelistas coincidieron en que el enfoque de ecología integral propuesto por el Papa Francisco es uno de los aportes más relevantes del documento, pues articula la justicia ambiental con la justicia social. “No existen dos crisis separadas, una ambiental y otra social: es una sola y compleja crisis socioambiental”, enfatizó Saavedra.

Además, destacaron la importancia de recuperar y difundir el verdadero alcance de una encíclica como Laudato Si, que no solo plantea una denuncia sobre el estado del planeta, sino también propuestas concretas para la acción política, económica, educativa y espiritual. En ese sentido, remarcaron la necesidad de que el mensaje llegue también a los jóvenes, quienes pueden jugar un rol clave en este cambio de paradigma.

De cara al décimo aniversario de Laudato Si, que se conmemora en junio de este año, los participantes hicieron un llamado a fortalecer la articulación entre movimientos ciudadanos, espacios eclesiales y plataformas ecuménicas. “Tenemos grandes hitos por delante: la COP 30 en Brasil, los 80 años de la ONU, el jubileo de la esperanza. Es momento de proponer, unir y actuar en defensa de la vida y de la casa común”, concluyó Valdeavellano.

En el programa La Hora Verde se reafirmó que Laudato Si no es solo un documento religioso, sino una hoja de ruta ética y política para enfrentar la crisis climática con justicia, solidaridad y esperanza. Hoy, tras la partida del Papa Francisco, su voz profética resuena con más fuerza: cuidar la casa común es un imperativo moral, espiritual y civilizatorio. Su legado nos convoca a actuar, con urgencia y con amor, por la vida del planeta y de todos sus pueblos.

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