LA NUEVA MODIFICATORIA DEL ESTUDIO DE IMPACTO AMBIENTAL DE LAS BAMBAS- Editorial boletín AMP enero 2024

La empresa minera Las Bambas ha presentado una nueva modificatoria de su estudio de impacto ambiental (MEIA). Esta sería la cuarta MEIA, que además se pretende hacer sin una adecuada información y sin una participación oportuna de la población que se ubica en la zona de influencia.

Llama poderosamente la atención que para esta nueva modificación se hayan aplicado normas de la época de la pandemia (por obvias razones, en ese momento se restringía la participación ciudadana) cuando es una situación ya superada. Lo real es que el contenido del MEIA no ha sido socializado con las poblaciones con el tiempo que requiere la revisión de una información compleja y extensa.

Preocupa también la calidad del documento presentado. Por ejemplo, el Resumen Ejecutivo no cumple con los estándares planteados por el propio Servicio Nacional de Certificación Ambiental para las Inversiones Sostenibles (Senace). Identificamos los siguientes problemas básicos:

  • La redacción del documento no es clara, por lo tanto, no cumple el objetivo de informar a la población. Además, la estructura del documento no presenta un orden lógico.
  • No describe con claridad los impactos de las modificaciones, ni cómo se afectará de manera directa o indirecta la zona de influencia y la calidad de vida de la población.
  • No se ha colocado un glosario de términos. Las siglas y abreviaturas, utilizadas a lo largo del documento, no son explicadas.
  • Hay muy poca claridad en la delimitación de las zonas de influencia social directa e indirecta, así como las áreas de impacto ambiental directo e indirecto.

Adicionalmente, mencionamos algunos de los principales aspectos críticos del MEIA:

  • La propuesta de ampliación del Tajo Ferrobamba en 285.3 hectáreas (de 408.7 a 694 hectáreas) no presenta aspectos técnicos fundamentales, como estudios específicos (especialmente hidrológicos e hidrogeológicos), que describan los impactos ambientales de una ampliación que casi duplica la operación actual.  
  • No se abordan preguntas claves: ¿cómo se comportarán los acuíferos? No se ha presentado mayor información ni modelamiento del comportamiento de los acuíferos como consecuencia de este cambio tan significativo.
  • La ampliación va a generar más de dos millones de toneladas de desmonte que no cuenta con una disposición final.
  • Toda esta ampliación generará diferentes impactos: ruidos, calidad del aire, la dispersión de agentes contaminantes con efectos sobre la salud humana y ambiental. Estos impactos se acentuarán por el minado adicional que se hará y la apertura de rutas alternas de transporte de vehículos de carga pesada.
  • No se informa adecuadamente sobre el control de aguas ácidas, producto de la exposición de grandes cantidades de material de desmonte y desecho a la intemperie (vientos y lluvias). Tampoco hay información sobre el incremento de relaves y su disposición final en una presa que se tendrá que redimensionar.
  • No hay mayor análisis sobre la alteración de la hidrología e hidrogeología de la zona (cuerpos de agua superficiales y subterráneos) como consecuencia de la ampliación del tajo Ferrobamba.
  • Preocupa que el inventario de manantiales en el área de influencia haya sido realizado sin la participación de las comunidades campesinas.
  • Lo cierto es que se perderán de manera irreversible 12.36 hectáreas de bofedales. Igualmente, se afectará tierra fértil y apta para la agricultura.
  • Disminuirán los caudales de los ríos Ferrobamba (70%) y Chalhuahuacho (18%). Además, empeorará la calidad del agua del rio Chalhuahuacho, que además de perder caudal natural (-18%), recibirá vertimientos de aguas residuales, cuyo pretratamiento no está especificado en el MEIA.
  • También serán afectados otros cuerpos de agua existentes, especialmente la laguna Charcascocha, que se convertirá en depósito de material de baja ley. La laguna Jalansiricocha y el reservorio de agua Chuspiri recibirán las aguas de no contacto que serán desviadas sin ningún tratamiento ni medidas de control de calidad antes de su vertimiento. El reservorio Chuspiri abastece de agua fresca a toda la zona.

Por estos y varios otros considerandos, varias comunidades y organizaciones representativas de Cotabambas, han expresado su rechazo y han solicitado que el SENACE no apruebe esta cuarta modificatoria del mencionado proyecto minero.  

Compartir: