Impactos invisibles del megapuerto de Chancay

Antony Apeño

Mientras se acerca la fecha de inauguración de la primera etapa del Terminal Portuario Multipropósito o Megapuerto de Chancay prevista para noviembre de este año, se viene difundiendo en los medios los beneficios que ocasionará este proyecto. Sin embargo, se habla poco de los perjuicios y existen impactos que no están siendo percibidos ni analizados.

Imagen: Gobierno del Perú

Demanda de terrenos y perdida de ecosistema costeros

Las zonas costeras son lugares concurridos e importantes para diferentes asentamientos humanos1. De los 13 países que integran Sudamérica, seis de ellos (46%) tiene una capital costera y 21 de las 33 megaciudades del mundo está ubicadas en zonas costeras2. Según Barbier et al. (2008) y Rao et al. (2015) las zonas costeras llegan a albergar aproximadamente un tercio de la población mundial y son lugares que llegan a tener el doble de densidad poblacional que zonas no costeras. Perú no es ajeno a esta tendencia, pues gran parte se población está asentada en la zona costera.

Esta presencia cercana de las poblaciones humanas tiene influencia en los ecosistemas que se encuentran presenten en estas zonas costeras (ríos, lomas, zonas marinas, por mencionar algunos de ellas). Si bien es cierto, las poblaciones humanas sacan provecho de las distintas actividades económicas y servicios ecosistémicos que la zona costera puede brindar, muchas de estas actividades generan impactos en sus ecosistemas (por ejemplo, degradación del hábitat, perdida de especies y contaminación)1.

Figura 1. Collage de evidencia de impacto en lomas de Ancón y Lachay (fotos de redes sociales).

La construcción del megapuerto de Chancay ha comenzado a jugar un rol influyente en este sentido. Las zonas aledañas a dicha mega construcción pertenecen a ecosistemas importantes temporales, como lo son las lomas costeras (ecosistemas presentes solo en Perú y norte de Chile). Estos ecosistemas han sido altamente impactados por el tráfico de tierras en toda la costa peruana. A pesar de ello, las lomas de Ancón, Huaral (Iguanil, Chancayllo y Chancay) y Huaura (Lachay) eran ecosistemas donde la intervención humana no había llegado en grandes proporciones. Sin embargo, en el último año se ha observado el incremento de trafico de terrenos, y presencia de invasiones en dichas zonas.

Es importante mencionar que la población se ha comenzado a moverse a las zonas cercanas al megapuerto, con la finalidad de estar cerca a las “oportunidades laborales” y al “desarrollo” que generara este proyecto. Esto ocasionará una gran problemática en las zonas costeras aledañas al megapuerto, por la carga de población que impactará de gran forma a los ecosistemas como los antes mencionados, y más aún si consideramos que históricamente no tenemos una buena planificación territorial, generando otros impactos como el incremento de desechos que no son tratados y que seguramente irán a parar a nuestra zona marina, contaminado estos espacios.

Competencia por espacios de pesca y sobreexplotación de recursos

Como se conoce en las zonas del megapuerto y aledañas, no se podrá realizar pesca artesanal. Si bien es cierto, se indemnizó a algunas asociaciones de pescadores, esto no solucionará el problema de fondo de los pescadores. Debido a la necesidad de poder realizar su actividad, estos han comenzado a desplazarse a zona norte aledaña, generando competencia y conflictos con otros pescadores ya ubicados en dichos espacios. A esto tenemos que sumarle la sobreexplotación de los recursos marinos que se generará producto al incremento de pescadores en las nuevas zonas marinas que buscarán los pescadores desplazados por el megapuerto. Quizás los más afectados serán los recursos marinos de zonas como Hatillo, Chancayllo, Punta salinas y Huacho.

Es importante mencionar que mucha de estos ecosistemas que podrían ser impactados pertenecen a zonas reservadas que por su importancia ecosistémica se busca conservar. Es importante que la empresa propietaria del proyecto del megapuerto comience a observar y trabajar en estos impactos que no están siendo contemplados. De igual forma, nuestras autoridades tienen que comenzar a fiscalizar estos impactos que seguramente no han identificado hasta el momento.

  1. Magalhães Filho, L., Roebeling, P., Villasante, S., & Bastos, M. I. (2022). Ecosystem services values and changes across the Atlantic coastal zone: Considerations and implications.  Marine Policy, 145, 105265.
  2. Martínez, ML, Intralawan, A., Vázquez, G., Pérez-Maqueo, O., Sutton, P., & Landgrave, R. (2007). Las costas de nuestro mundo: Importancia ecológica, económica y social. Economía ecológica, 63 (2-3), 254-272.
  3. Barbier EB, Koch EW, Silliman BR, Hacker SD, Wolanski E, Primavera J, Granek EF, Polasky S, Aswani S, Cramer LA, Stoms DM, Kennedy CJ, Bael D, Kappel CV, Perillo GME, Reed DJ (2008) Gestión basada en ecosistemas costeros con funciones y valores ecológicos no lineales. Ciencia 321: 319–323.
  4. Rao, N. S., Ghermandi, A., Portela, R., & Wang, X. (2015). Global values of coastal ecosystem services: A spatial economic analysis of shoreline protection values. Ecosystem services, 11, 95-105.

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