Berta

Desde el pasado jueves 3 de marzo hemos perdido la cuenta de los comunicados que hemos leído y firmado, pensando quizás que de esa manera canalizábamos toda nuestra indignación por el cobarde asesinato de Berta. Vana esperanza.

Conocimos a Berta Cáceres hace unos años en uno de esos encuentros en los que activistas de diferentes países comparten sus experiencias, se encuentran, se reconocen entre sí y también se sienten menos solos en sus luchas y resistencias. Desde mucho antes sabíamos de sus convicciones y su indesmayable compromiso con la defensa de los pueblos indígenas de su país Honduras, la defensa de sus territorios frente a la amenaza de los grandes proyectos de represas, hidroeléctricas, entre otros.

También sabíamos de las amenazas contra ella y su familia. Precisamente por esas amenazas y los graves riesgos que corría, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos le había otorgado medidas cautelares que lamentablemente no sirvieron de mucho.

Acabo de ver las fotos de su entierro y los comunicados no sirven para detener la indignación que aumenta. Con las fotos, la imagen de Berta regresa: la fuerza de sus palabras, su compromiso y firmeza.

(Foto: goldmanprize.org)

Además, viendo las fotos del entierro de Berta cómo no pensar en los casi 300 ambientalistas asesinados en los últimos dos años en América Latina. Y en el Perú, cómo no recordar a Edwin Chota y su lucha por defender los bosques en Ucayali de la mafia de taladores ilegales; en Hitler Rojas, presidente del Frente de Defensa del Río Marañón, quien como Berta defendía sus tierras de los impactos de varias represas. Por supuesto, cómo no pensar también en la lucha presente de Máxima Acuña y su familia, Milton Sánchez y tantos otros, que nos siguen entregando grandes lecciones de vida.

Las cifras de la Defensoría del Pueblo del Perú son contundentes: en el período 2006-2015, 263 personas han muerto como consecuencia de conflictos sociales y 4,430 han sido heridas.

Más allá de los comunicados que seguramente seguirán circulando, el recuerdo de Berta, Edwin Chota, Hitler Rojas y de tantos otros, nos compromete a seguir su ejemplo. Es el homenaje que se merecen.

07 de marzo de 2016